Fue tu cárcel la que impidió la libertad del amor,
fueron esos barrotes que pusiste frente a tu corazón;
los que te convirtieron en convicta de tus sentimientos.
Ahora quieren escapar de tu alma, partirte el pecho…
¿Verdad que duele guardarse todo eso?
El amor es una fuerza incontenible, no debe ser enjaulada
porque un día esta escapa, revienta en el ambiente y hace su magia,
las llaves están en ti, sólo necesitas abrir las rejas
para liberar lo más hermoso que tienes en tu interior…
No te guardes nunca el amor.