viernes, 16 de julio de 2010

Historia de madrugada:



Entre el claroscuro de aquella madrugada
donde caían las penas con la lluvia,
escupidas por las gárgolas de la Basílica,
me encontraba mojado de llantos de ángeles;
suaves a la calle empedrada,
hirientes a la epidermis congelada…

Miré que las tórtolas huían a sus palomares
tratando de refugiarse, acurrucándose
en bandadas…
ellas eran muchas y yo, sólo en la calle
con el cabello cubriendo mi rostro
y en mis hombros cargando su ausencia.

Me adentré en el vientre de la madrugada
donde las estrellas parecían más lejanas
tan distantes, tan borrosas,
triste noche en la que tuve que recordarte
entre vapores y el humo del cigarrillo
dibuje tu silueta en el denso ambiente.

Mi compañera fue la neblina
y esta evitó que conversara para mis adentros;
iba platicándole sobre teología
para evitar temas más personales…
ya era muy tarde, pronto amanecerá,
tendré que volver…

PcWolf.


2 comentarios:

  1. Melncolico relato, plasmaste muy bien la idea de la soledad, el recuerdo y la tristeza... me ha gustado mucho!!

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  2. Nuevamente gracias por leer y comentar niña Ale!

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